Cinco consejos para evitar lesiones en el gimnasio
Mantén tu cuerpo en forma y sin lesiones: consejos de BODYTECH
En muchos casos, entrenar puede ser la mejor forma de empezar el día. Al hacer ejercicio, se generan más endorfinas dirigidas a la parte emocional del cerebro, estimulando los centros de placer y provocando una sensación de calma y bienestar tanto física como mental. Sin embargo, esto puede cambiar drásticamente por la frustración ante una lesión.
El esfuerzo que se realiza a diario en un centro de entrenamiento, en busca de alcanzar un objetivo, podría verse obstaculizado por una contusión, torcedura y/o dislocación. Por lo cual es importante tomar las precauciones del caso para no sufrir ningún tipo de daño que impida la realización de actividad física.
En ese sentido, BODYTECH, la cadena de gimnasios que ofrece la mejor experiencia de entrenamiento basada en la salud y bienestar, brinda los siguientes consejos para evitar lesiones al entrenar:
- Calienta antes de empezar. Antes de iniciar el entrenamiento es importante preparar el cuerpo. El calentamiento, que debe incluir distintos tipos de ejercicio, como trotar, estiramiento suave y un poco de ejercicios de resistencia, debería durar aproximadamente unos 15 minutos, tiempo suficiente para comenzar a sudar, pero sin la sensación de cansancio.
- Cuida tu postura. Tan importante como entrenar es la manera de hacerlo. Una buena técnica asegura un buen desempeño. Especialmente al utilizar máquinas o pesas para ejercitarte, el posicionarte de manera correcta será de gran ayuda. Seguir los consejos del entrenador será vital para el uso correcto de los equipos de forma segura y efectiva al iniciar una rutina.
- Trabaja con esfuerzo progresivo. En muchas ocasiones el deseo de experimentar un gran esfuerzo desde el principio, cuando recién se empieza, puede ser contraproducente. Es fundamental que las cargas se manejen de manera responsable y que el aumento en la intensidad sea gradual, evitando siempre cambios demasiado bruscos.
- Descansa para recuperar energía. Es esencial incluir al menos un día de descanso a la semana en la rutina de entrenamiento, para permitir que el organismo se recupere de la actividad física realizada. Además, es recomendable alternar el ejercicio entre diferentes grupos musculares en días consecutivos.
- Balancea tu alimentación. Consumir los alimentos adecuados después de una sesión de ejercicio contribuirá a tu recuperación, repondrá tus niveles de energía y proporcionará proteínas esenciales para la reparación y reconstrucción de cualquier tejido muscular dañado. La falta de carbohidratos puede causar fatiga y aumentar el riesgo de lesiones durante el ejercicio.
“La seguridad es una prioridad en el gimnasio. Siguiendo estos consejos, las personas pueden disfrutar de sus rutinas de ejercicios mientras minimizan los riesgos de lesiones. Es importante recordar que el entrenamiento debe ser una experiencia saludable y sostenible”, comentó Carolina Giraldo, jefe de operaciones de BODYTECH.
Un buen calentamiento y una preparación adecuada de los músculos ayuda a mantener las articulaciones en buen estado. Si bien los calambres y la sobrecarga muscular no se consideran lesiones, sí son alteraciones musculares o señales de fatiga, que pueden ser indicios de riesgo.
Finalmente, evaluar cuidadosamente los niveles de intensidad y carga para que el cuerpo, a pesar de los esfuerzos realizados, pueda recuperarse y mantener un equilibrio tanto en términos musculares como articulares, con el fin de prevenir lesiones.